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Nuestro equipo
Observatorio de Pueblos Originarios
En Argentina, los Pueblos Originarios se han visto históricamente sometidos a un proceso de exclusión, explotación y enajenación, cuando no de exterminio; viviendo en la actualidad en condiciones de extrema marginación y pobreza. Coadyuva a esta situación el que la tierra y los recursos naturales, de los que dependen en gran parte para vivir, se encuentren por un lado colapsados y sin capacidad de sustentación debido a su apropiación privada individual y a su depredación sistemática y por el otro a una histórica política de ausencia del estado en temas en los que la ley indica una reparación histórica como el reconocimiento de las tierras que tradicionalmente ocupan estos pueblos.
A partir de las últimas décadas del siglo XX, se ha logrado el reconocimiento constitucional y un conjunto de normativas provinciales, nacionales e internacionales referidas a los derechos individuales y colectivos que asisten a dichos Pueblos. En esto, cabe destacar el fuerte papel de la movilización indígena como impulsora del debate, protagonista fundamental en el movimiento de reformas legislativas y en la adecuación de los textos legislativos nacional y provinciales.
En sincronía con de la debilidad de las políticas públicas hacia las poblaciones indígenas del país, existe un proceso económico estructural en el cual la expansión de la frontera agraria y la concentración económica rural han avanzado sobre los espacios no incluidos a las formas de explotación que impone la producción rentística, incluso sobre las tierras tradicionalmente ocupadas por Pueblos Originarios reconocidas constitucionalmente. Más allá, entonces, de la vigencia de las normativas mencionadas, en los hechos se observa una escasa implementación de los mandatos constitucionales, lo que implica una gran distancia entre la letra jurídica y la producción de políticas concretas. A lo largo y ancho del país, los Pueblos Originarios siguen luchando para que se les entreguen la tierra, para que se reconozca en su identidad, por una educación bilingüe e intercultural. Es decir, continúan en la lucha por el efectivo ejercicio de los derechos consagrados desde lo formal.
En la sociedad en general, y en particular en organismos públicos y organizaciones de Pueblos Originarios, existe una creciente necesidad de contar con instrumentos para la observación (recolección, sistematización, análisis y divulgación) de información sistemática que permita a los gobiernos y las organizaciones de la sociedad civil fijar metas en cuanto a demandas de las organizaciones sociales y de las políticas públicas, y monitorear los avances en materia del cumplimiento de los compromisos adquiridos en el ámbito internacional, regional, nacional y local.
La toma de decisiones, la gestión de políticas y recursos, el fortalecimiento organizativo, el desarrollo y definición de demandas, la realización efectiva de derechos de los Pueblos Originarios de Argentina, requiere de un conocimiento confiable y sistemático generado tanto desde los Pueblos Originarios y sus organizaciones como de universidades, institutos y reparticiones públicas. Un sistema permanentemente actualizado y accesible de información a nivel nacional.
Por otro lado se considera importante como insumo para las distintas organizaciones de Pueblos Originarios contar con información sistemática y constante del desarrollo y formas de ejecución de las políticas públicas que los atañen.
Tanto en el ámbito de la gestión de políticas públicas como en el de las organizaciones de Pueblos Originarios entendemos necesario un aporte que la Universidad Publica puede hacer en el sentido de orientar su producción y experiencia en capacitación y formación. Actividades que tiendan al fortalecimiento de aquellos procesos y organizaciones capaces de avanzar en soluciones y en la visibilizacion de los distintos conflictos y demandas de los Pueblos Originarios
En ese marco, entendemos que un Observatorio para Pueblos Originarios es un instrumento adecuado que permitirá la sistematización, análisis, difusión y democratización de la información. En este punto es importante destacar que el rol como universidad pública nos plantea el desafío de la producción de un conocimiento apropiado e inclusivo con participación de los sectores académicos y de las organizaciones de PO.
Este Observatorio, planteado desde los 15 19 años de experiencia del Programa Permanente de Investigación, Extensión y Desarrollo en Comunidades Indígenas , propone abordar distintos aspectos que se han venido trabajando durante estos años como lo son: salud, territorio, historia, marco legal, derechos, educación, comunicación, memoria, medioambiente. Además, esta experiencia nos pone en una situación inmejorable para la articulación en el proyecto de numerosas organizaciones de Pueblos Originarios, el aporte permanente del Programa en la producción conjunta de conocimiento en las distintas áreas y la inclusión de toda la producción académica de los distintos equipos de nuestra Universidad y otras que han desarrollado sobre el tema.
1. Desde hace quince años, la Facultad de Filosofía y Letras a través de la Sección Antropología Social del Instituto de Ciencias Antropológicas y su Secretaría de Extensión Universitaria, lleva adelante el Programa Permanente de Investigación, Extensión y Desarrollo en Comunidades Indígenas. Dicho programa se propone actuar como nexo entre la Universidad y la comunidad y extiende sus actividades a todos los Pueblos Originarios del país y a otros sectores de la sociedad, fundamentalmente a partir de la creación y puesta en marcha del “Centro de Documentación, Divulgación, Capacitación, y Asesoramiento de Pueblos Aborígenes de la República Argentina” (CEDCAPI), que tiene su origen en 1994 como resultado de un trabajo conjunto y consensuado entre miembros de las comunidades de la región Chaco centro occidental, miembros de la Secretaría de Extensión Universitaria antes mencionada y organizaciones solidarias. El Programa busca incidir con su acción en tres ámbitos diferenciados: Facultad, comunidades y organizaciones indígenas, y en aquellos espacios de nuestra sociedad en donde se exprese interés para y por los Pueblos Originarios.